11th Dec 2024
En un reino lejano, Vino, un gigante amable, se despertó al hear un ruido. "¡Ay, no! ¿Qué sucede?" se preguntó mientras salía de su cueva. Al encontrar su hermosa fuente de cristal llena de agua pura, vio a un grupo de animalitos bebiendo. "¿Qué hacen aquí? Esto es mío!" exclamó Vino con una voz retumbante. Los animalitos saltaron asustados, pero la valiente tortuga, que era pequeña pero sabia, respondió: "Es solo agua, gigante. ¡Podemos compartir!" La idea le hizo reflexionar a Vino.
?alt=media&token=8813aa82-ae50-4be0-acc6-c837362ed4cc)
Vino sonrió, su gran corazón latía con alegría. "Tienes razón, pequeña tortuga. ¡Compartamos la fuente!" decidió. Desde ese día, el gigante y los animalitos se reunieron cada día en la fuente, riendo y jugando. Vino incluso les contaba historias de antiguos reinos. "¡Qué bonitos cuentos, Vino!" decía la tortuga mientras los demás aplaudían. Aquel gigante no solo reclamó lo que era suyo, sino que aprendió que compartir podía traerle más alegría que poseer.
?alt=media&token=48a93a5d-f2e3-47ac-b319-34f982f37694)
Vino, un gigante amable con cabello largo y barba, en su cueva junto a una hermosa fuente de agua cristalina, rodeado de pequeños animales como tortugas y pájaros, ilustración infantil, colorido, alegre, perspectiva desde arriba
