24th Apr 2025
Roberto, un niño de 9 años, miró su abuelo con emoción. "¡Voy a arreglar tu bote!", exclamó mientras corría hacia el pequeño barco. Con herramientas en mano, reparó la madera y pintó el bote de un brillante color azul. Cuando terminó, su abuelo sonrió orgulloso. "¡Ahora puedes navegar, Roberto!", le dijo. Con su corazón lleno de alegría, Roberto se subió al bote y comenzó a navegar hacia la mágica isla de los globos.
En la isla, Roberto se encontró con una lechuza llamada Lila, que tenía grandes ojos amarillos y plumas suaves. "¡Hola! ¡Sueño con navegar por los océanos!", dijo Lila, batiendo sus alas. "¿Te gustaría que te acompañe?" Roberto asintió, emocionado. Juntos navegaron hacia el horizonte, disfrutando de nuevas aventuras, mientras los globos de colores danzaban en el cielo. "¡Mira, una ballena!", gritó Lila. "¡Sí, y una tormenta se acerca!", respondió Roberto, mientras ambos se preparaban para el viaje a través de los vastos océanos.