28th Oct 2024
Había una vez una tortuga llamada Tula que vivía en un hermoso estanque. Un día, después de una lluvia suave, Tula vio un arcoíris brillante en el cielo. Decidió que quería seguirlo para descubrir los tesoros escondidos al final. Tula era valiente y curiosa, así que se preparó para su emocionante aventura.
Tula comenzó su viaje, moviéndose lentamente por el bosque colorido. Mientras avanzaba, se encontró con un pájaro amarillo llamado Pipo. Pipo le dijo que también había visto el arcoíris y se unió a Tula en su búsqueda. Juntos, cantaban y reían mientras caminaban, disfrutando de la belleza de la naturaleza.
Después de un rato, llegaron a un gran campo de flores. Todas eran de diferentes colores: rojas, azules, moradas y amarillas. Allí conocieron a un conejo llamado Roco, que tenía orejas largas y suaves. Roco se unió a ellos, emocionado por la aventura y prometió ayudar a encontrar el final del arcoíris.
El trío siguió adelante hasta que encontraron un arroyo cristalino. Cruzaron el agua saltando de piedra en piedra. Tula, Pipo y Roco se ayudaron mutuamente, tomando turnos para saltar y no caer. La amistad entre ellos creció mientras superaban obstáculos juntos.
Finalmente, llegaron a un colina desde donde podían ver el arcoíris en toda su gloria. Al pie de la colina, encontraron una caja antigua llena de colores brillantes: pinturas, joyas y caramelos. Tula, Pipo y Roco celebraron su amistad y compartieron los tesoros. Desde ese día, siempre recordarían su aventura juntos y todos los colores del arcoíris.