28th Oct 2024
Había una vez una hermosa mariposa llamada Lila. Lila volaba por el bosque, buscando flores brillantes. Siempre elegía las flores más bellas para abrazar. Su amor por las flores era tan grande que hacía sonreír a todos a su alrededor.
Un día, Lila encontró una flor hermosa, pero estaba triste. Era una flor solitaria y no tenía amigos. Lila decidió abrazarla con sus suaves alas. El abrazo hizo que la flor sonriera y floreciera aún más.
La flor, agradecida y feliz, dijo: 'Gracias, Lila. Tu abrazo me hace sentir especial'. Lila sonrió y dijo: '¡Todas las flores son especiales! ¡Debemos compartir el amor!'. Desde ese día, se volvieron las mejores amigas.
Lila y la flor comenzaron a abrazar a otras flores en el bosque. Cada flor que abrazaban se llenaba de alegría. Pronto, todo el bosque estaba lleno de risas y colores gracias a los abrazos de Lila.
El bosque se convirtió en un lugar mágico, lleno de amor. Lila continuó abrazando flores y compartiendo su cariño, haciendo que cada día fuera brillante y especial. Su amor por las flores nunca se detuvo.