28th Oct 2024
Había una vez un pato llamado Pato. Pato era muy valiente y curioso. Un día, decidió que quería explorar el océano. Con un gran salto, se zambulló en el agua azul. A medida que nadaba, el agua era fresca y clara. Pato se emocionó mucho al ver todo alrededor.
Mientras nadaba, Pato encontró un pez muy especial. Era un pez astrónomo con grandes ojos brillantes. Este pez llevaba una pequeña estrella en su cabeza. Pato se acercó y dijo: "¡Hola, pez! ¿Qué haces aquí abajo?" El pez sonrió y contestó: "Estoy mirando las estrellas del océano."
Pato pensó que era asombroso. "¿Tiene el agua estrellas también?" preguntó. El pez astrónomo respondió: "Sí, pero son muy diferentes. Ven, te mostraré." Y juntos nadaron hacia un lugar mágico, lleno de luz.
Llegaron a un bosque de corales que brillaban como estrellas. Había peces de todos los colores que jugaban alrededor. Pato se sintió muy feliz. Pensó que este lugar era como un sueño. El pez astrónomo lo miró y dijo: "¡Bienvenido a mi hogar!"
Pato y el pez comenzaron a jugar entre los corales. Hicieron burbujas y nadaron en círculos risueños. Pato nunca había sido tan feliz. Mientras jugaban, el pez le contó historias de las estrellas que veía cada noche desde el fondo del mar.
"Hay una estrella que brilla más que las demás", dijo el pez. "Esa estrella es mágica y puede conceder un deseo." Pato tenía un deseo en mente. Quería que todos los patos del mundo pudieran ver este lugar mágico.
"Vamos a buscar la estrella mágica!", exclamó Pato emocionado. Nadaron juntos, buscando entre los corales y las conchas. Al fin, encontraron un lugar donde la luz brillaba intensamente. Era ahí donde habitaba la estrella mágica.
Llamaron a la estrella y le contaron su deseo. La estrella brilló aún más. Pato sintió que su corazón se llenaba de alegría. "Gracias, estrella!" gritó. El pez astrónomo sonrió, feliz de ayudar a su nuevo amigo.
Después de un gran día de aventuras, Pato se despidió del pez. Sabía que volvería a visitar a su amigo en el fondo del mar. Con un último vistazo a las estrellas del océano, Pato salió a la superficie, listo para contar su historia.
Nadie creía que un pato pudiera hacer amigos en el fondo del mar. Pero Pato sabía que la valentía y la curiosidad lo habían llevado a una aventura inolvidable.