28th Oct 2024
Había una vez un elefante llamado Eloísa. Ella era un elefante grande y bonito, con piel gris y orejas gigantes. A Eloísa le encantaba bailar, pero tenía miedo de mostrarlo. Pensaba que otros animales podrían reírse de ella. Un día, mientras practicaba en secreto, su amigo el loro, Lalo, la vio.
Lalo, un loro colorido con plumas verdes y rojas, voló cerca de Eloísa. Se posó en su hombro y le dijo: "¡Eloísa, tienes que bailar! Eres maravillosa!" Eloísa miró al loro y sintió un pequeño destello de valentía. Decidió que era hora de mostrar su talento a todos.
Eloísa organizó un espectáculo en el claro del bosque. Invitó a todos sus amigos: el león, la jirafa, y hasta la tortuga. Cuando llegó el día, Eloísa estaba nerviosa. Pero al ver a todos sus amigos sonriendo, recordó las palabras de Lalo.
Con música alegre resonando en el aire, Eloísa empezó a mover sus patas con gracia. Sus amigos aplaudían y gritaban: "¡Bravo, Eloísa!" La jirafa se estiró para ver mejor, y el león incluso empezaba a moverse con el ritmo. Eloísa se sentía feliz mientras bailaba.
Al final del espectáculo, todos los animales se acercaron a Eloísa con sonrisas. "Eres una gran bailarina, Eloísa!" dijeron todos. Ella sonrió y vio que ser diferente era especial. Desde ese día, continuó bailando y animando a otros a mostrar su propio talento.