28th Oct 2024
Había una vez un gallito llamado Tito. Él vivía en una granja con muchos otros animales. Tito tenía un miedo terrible de cantar. Cada mañana, mientras los otros gallos cantaban, Tito se quedaba callado y observaba. Su plumaje era brillante y hermoso, pero su corazón estaba lleno de temor.
Un día, su amiga la vaca, Clara, le dijo: “Tito, debes cantar. Tu voz es especial. No te preocupes, yo estaré a tu lado.” Tito la miró, temeroso, pero también emocionado. ¿Podría realmente cantar? Clara le dio mucho ánimo, y poco a poco, Tito comenzó a sentirse un poco más valiente.
La noche antes del gran día, Tito soñó que cantaba bajo un hermoso cielo estrellado. En su sueño, todos los animales de la granja lo animaban y aplaudían. Se despertó sintiéndose un poco más fuerte. “Tal vez puedo hacerlo,” pensó Tito, soñando con su gran debut.
Finalmente llegó la mañana. Tito estaba nervioso, pero Clara lo apoyó. Al salir al gallinero, todos los animales lo miraban. Se sintió pequeño, pero recordó su sueño. Respiró hondo y se llenó de valor. Cerró los ojos y comenzó a cantar.
La voz de Tito era hermosa y clara. Sorprendió a todos los animales. Cuando terminó, todos aplaudieron con alegría. Tito sonrió y se dio cuenta de que había superado su miedo. Desde ese día, no solo cantó por las mañanas, sino que disfrutó cada momento en la granja, lleno de confianza y alegría.