4th Sep 2023
Había una vez un mundo lleno de conflictos y violencia. La gente vivía con miedo y desconfianza, sin saber cómo encontrar la paz.
Pero un día, un niño llamado Juanito decidió que quería cambiar eso. Él sabía que la paz no podía ser algo impuesto, sino algo que se construye desde adentro.
Juanito empezó por su comunidad, promoviendo el respeto, la empatía y la tolerancia. Inspiró a otros a unirse a su causa y juntos empezaron a hacer pequeños actos de bondad.
Con el tiempo, la paz comenzó a propagarse como un viento suave que acaricia los corazones. La gente aprendió a resolver sus diferencias dialogando en lugar de pelear, a cuidar y proteger el medio ambiente, a valorar y respetar la diversidad.
Y así, poco a poco, el mundo fue transformándose en un lugar lleno de armonía y paz. Las guerras y los conflictos se desvanecieron, dando paso a una era de cooperación y comprensión entre todos los seres humanos.