28th Oct 2024
Había una nube blanca en el cielo. Ella se llamaba Lluvia. Lluvia quería ayudar a las flores a crecer. Pero no sabía cómo hacerlo.
Un día, Lluvia miró hacia abajo. Vio flores de muchos colores. Eran rojas, amarillas y azules. Lluvia quería darles agua. Pero no podía regresar al suelo.
Entonces, decidió volar. Viajó hasta un río. Era un río grande y sabio. Se llamaba Río Sabio. Lluvia le preguntó: "¿Cómo puedo ayudar a las flores?"
Río Sabio sonrió y dijo: "¡Tú puedes ser lluvia! Cuando lloras, das agua a las flores". Lluvia se sintió emocionada. Pero también tenía miedo.
"No sé cómo llorar", dijo Lluvia. Río Sabio le dijo: "Solo piensa en lo que amas. Las flores, los arboles y tzu mundo". Lluvia cerró los ojos y pensó.
Finalmente, Lluvia sintió algo especial. Era una sensación cálida. Entonces, gotas comenzaron a caer. ¡Era lluvia!
Las flores la vieron y sonrieron. Estaban felices. Lluvia estaba feliz. Ella seguía llorando, dando amor.
Las flores comenzaron a bailar con alegría. Llenas de agua, crecieron más fuertes y hermosas. Lluvia aprendió a dar y compartir.
Después de muchas lluvias, Lluvia regresó al río. Dijo: "Gracias por tu ayuda. Ahora puedo hacer feliz a las flores".
Río Sabio contestó: "Siempre que des amor, ayudarás a otros. Eso es lo más importante".