28th Oct 2024
Había una vez un pequeño dragón llamado Dimi. Dimi era un dragón travieso que amaba los dulces. En su cueva llena de caramelos y golosinas, decidió que quería hacer la mejor fiesta de dulces de todas.
Dimi miró a su alrededor. "¡Necesito ayuda!", pensó. Fuera de su cueva, tenía muchos amigos que podían ayudarle. Así que voló alto en el cielo para buscar a sus amigos: la hada Lila, el conejo Roni, y la tortuga Tito.
Primero, encontró a Lila. Ella estaba recogiendo flores brillantes en el bosque. "¡Hola, Lila!", gritó Dimi. "¿Quieres ayudarme a organizar una fiesta de dulces?" Lila sonrió y dijo: "¡Claro que sí!".
Juntos, fueron a encontrar a Roni, el conejo. Él estaba sentado bajo un árbol, disfrutando de su zanahoria. Dimi le preguntó: "Roni, ¿también quieres ayudarnos?" Roni saltó de alegría y dijo: "¡Sí! Me encantan los dulces!".
Ahora, el grupo fue a buscar a Tito, la tortuga. Tito estaba tomando una siesta al sol. Cuando se despertó, dijo: "¿Fiesta de dulces? ¡Yo también quiero ayudar!" Así que todos fueron a la cueva de Dimi.
Dimi les dijo: "Tenemos que hacer dulces mágicos!" Lila trajo polvo de estrellas, Roni trajo zanahorias de caramelo, y Tito trajo su jarra de miel. Comenzaron a mezclar ingredientes y a hacer los dulces más locos que imaginaron.
Cuando hubo suficiente dulces, Dimi pensó en la decoración. "Necesitamos globos y luces!" Lila hizo globos con su magia, Roni colgó luces brillantes, y Tito ayudó a poner todo en su lugar.
Finalmente, llegó el gran día de la fiesta. Los amigos de Dimi llegaron con grandes sonrisas. La cueva estaba llena de risas y dulces. Todos se divirtieron mucho, bailando y comiendo.
Al final de la fiesta, Dimi dijo: "¡Gracias a todos por ayudarme! No habría sido lo mismo sin ustedes." Sus amigos sonrieron, sabiendo que habían creado algo muy especial juntos, lleno de amor y dulces!
Y así, el pequeño dragón Dimi aprendió que con la ayuda de los amigos, cualquier fiesta puede ser la mejor.