28th Oct 2024
Había una vez un pequeño caracol llamado Carlos. Carlos vivía en un hermoso jardín lleno de flores brillantes y verdes hojas. Pero Carlos era muy curioso y quería explorar más allá de su hogar. Un día decidió salir y conocer el mundo.
Carlos empezó su viaje. Se deslizó lentamente sobre la hierba fresca. Mientras avanzaba, conoció a una hormiga llamada Antonia. Antonia era muy trabajadora y le contó historias sobre su colonia. Carlos se emocionó y decidió seguirla un rato.
Más adelante, Carlos se encontró con una mariposa llamada Valentina. Valentina era hermosa y colorida, con alas que brillaban bajo el sol. Valentina le enseñó a Carlos cómo podía ver el jardín desde lo alto. Juntos volaron unos momentos antes de que Carlos siguiera su camino.
Carlos continuó su aventura y llegó a un charco. Allí conoció a un sapo llamado Samuel. Samuel le habló sobre los secretos del agua y los insectos que vivían allí. Carlos se dio cuenta de que el mundo estaba lleno de amigos y sorpresas.
Al final del día, Carlos regresó a su jardín. Estaba feliz por haber hecho nuevos amigos. Aunque era solo un pequeño caracol, había vivido una gran aventura. Y sabía que había mucho más por explorar en el futuro.