28th Oct 2024
Había una vez una vaca llamada Lila. Lila vivía en una granja con muchos amigos. Un día, escuchó música y se sintió muy feliz. ¡Era música de guitarra! Lila soñaba con tocarla.
Lila se acercó a su amigo el gallo, que siempre cantaba bien. "¿Me puedes ayudar a tocar la guitarra?" le preguntó. El gallo sonrió y dijo: "¡Claro que sí!"
Juntos fueron a buscar una guitarra. Encontraron una vieja guitarra debajo de un árbol. Lila la miraba con emoción. "¡Voy a aprender a tocar!" dijo.
Lila y el gallo practicaron todos los días. Al principio, Lila no podía hacer sonar las notas. ¡Era difícil! Pero Lila no se rindió y siguió intentando.
Sus amigos, las gallinas y los patos, los escucharon. Ellos decían: "¡Sigue, Lila! Eres muy talentosa!" Eso animó a Lila a seguir practicando con alegría.
Después de mucho intento, Lila empezó a tocar. Las notas sonaban dulces y alegres. Se sentía feliz. Ella decía, "¡Soy una vaca guitarrista!"
Los animales de la granja se reunieron para escuchar a Lila. Ella tocó una hermosa canción. Todos bailaban y se reían. ¡Era una gran fiesta!
Lila se dio cuenta de que seguir su pasión era muy divertido. Aprender a tocar la guitarra la hacía sentir genial. Sus amigos la apoyaban siempre.
Al final, Lila tocó en una gran fiesta. Todos la aplaudieron. Lila sonrió y dijo: "¡Gracias, amigos, por ayudarme a realizar mi sueño!"
Lila aprendió que seguir tus sueños es importante y divertido. Ella siempre tocaría la guitarra, rodeada de amigos que la querían.