28th Oct 2024
Era un día soleado en el bosque. Los animales decidieron organizar una carrera emocionante. Todos estaban emocionados. Cada animal quería mostrar sus talentos especiales. Así que se empezaron a preparar.
La tortuga, aunque lenta, confió en su estrategia. "Voy a correr despacio, pero con constancia," dijo. La liebre se rió y dijo: "Yo ganaré en un abrir y cerrar de ojos, soy muy rápida!" El ciervo comenzó a estirarse, listo para saltar y correr. La carrera iba a comenzar.
El gran día llegó y todos los animales se reunieron. El búho, el más sabio, serviría de juez. "¡A la cuenta de tres!" gritó. Todos estaban listos, llenos de energía y emoción. Uno, dos, ¡tres!
Los animales comenzaron a correr. La liebre saltó adelante, veloz como el viento. La tortuga siguió a su propio ritmo, mientras que el ciervo saltaba por encima de troncos en el camino. Cada uno usaba su talento. La liebre, rápida, hizo una pausa, teniendo la certeza de que ganaría.
Pero al final, la tortuga llegó a la meta primero. Todos aplaudieron. Aprendieron que con paciencia y esfuerzo se pueden lograr grandes cosas. ¡La carrera fue un éxito! Todos los animales se sintieron orgullosos de sus talentos.