28th Oct 2024
En el azul profundo del océano, vivía un pez arcoíris. Tenía escamas brillantes de todos los colores. Un día, decidió explorar más allá de su hogar. Nadó entre corales y jugaron con burbujas de aire. Todos lo miraban y admiraban su belleza.
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El pez arcoíris llegó a una escuela de peces grises. Los peces grises eran tímidos y poco confiados. El pez arcoíris les sonrió y dijo: "¡Hola! No hay nada malo en ser diferente!" Los peces grises no lo creían. Se sentían inseguros.
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Entonces, el pez arcoíris propuso un juego. "Vamos a nadar juntos y a mostrar nuestras diferencias!" Todos los peces grises dudaron, pero finalmente decidieron unirse. Nadaron juntos y, poco a poco, empezaron a sentir alegría.
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Mientras nadaban por el océano, el pez arcoíris les enseñó canciones de colores brillantes. Los peces grises comenzaron a sonreír y a girar con alegría. Cada uno de ellos descubrió lo especial que eran. Su confianza empezó a crecer.
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Cuando el sol se puso, el pez arcoíris y los peces grises regresaron juntos. La escuela de peces era ahora un lugar más colorido y feliz. Desde entonces, todos aprendieron a ser ellos mismos, sintiéndose orgullosos de sus colores únicos.
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