28th Oct 2024
Una noche clara, Lucas estaba en su jardín mirando al cielo. De repente, vio una luz brillante en la hierba. Era un pequeño regalo envuelto en papel plateado. Lucas se agachó y lo tomó con cuidado. Al tocarlo, sintió una calidez especial que lo llenaba de alegría.
Al abrir el regalo, apareció una pequeña estrella dorada. "¡Hola, Lucas!" dijo la estrella con una voz ligera. "Soy Estrellita, guardiana de la luna. ¡Necesito tu ayuda!" Lucas estaba emocionado y aceptó la aventura. Estrellita lo llevó volando por el jardín hacia la luna brillante en el cielo.
Cuando llegaron a la luna, Lucas vio un mundo lleno de estrellas y colores. La luna, de rostro amable, le sonrió. "Gracias por venir, Lucas. Las estrellas están tristes. Se sienten solas porque no tienen amigos en la tierra."
Lucas pensó por un momento. "¡Podemos hacer una fiesta de estrellas! Invitemos a todos los niños del barrio para que conozcan a las estrellas y se hagan amigos." La luna y Estrellita aplaudieron de alegría. Juntos organizaron la fiesta con luces y música.
El día de la fiesta, muchos niños vinieron al jardín. Con cada rayo de luz, las estrellas brillaban más. Todos risas y bailes, Lucas había creado un lazo especial, un vínculo de amistad que nunca se rompería. La luna les dio las gracias y todos miraron el cielo con amor y esperanza.